Ayer por la noche decidimos cambiar de registro y elegimos un western.
«El Tren de las 3:10» («3:10 to Yuma«, 2007), dirigida por James Mangold, quien también dirigió «En la Cuerda Floja» (2005), es una revisión de una película clásica del género western de 1957 del mismo título.
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Sinopsis
Dan Evans, un granjero de Arizona que en el pasado sirvió en el ejército durante la guerra civil estadounidense, pasa por una muy mala situación económica. Por ello decide colaborar en el traslado del peligroso forajido Ben Wade hasta un pueblo, donde deberá montar a Wade en el tren de las 3:10 con destino a la prisión de Yuma (Arizona). De ese modo, cobrará una cuantiosa recompensa y evitará así la ruina de su rancho.
Una actualización del género western
Siempre es una grata experiencia ver una actualización del cine clásico si se hace con gusto y estilo. Pero el gran motivo por el que queríamos ver este film es su reparto, entre los que destacan claramente Russell Crowe y, sobre todo, mi adorado Christian Bale.
Poco vamos a decir del trabajo de Bale, siempre impecable. Russell Crowe, en su papel de forajido, cambia de registro y lleva al espectador a cuestionarse la mala conciencia de los forajidos.
Para mí este film presenta unas cuantas semejanzas con «Valor de Ley» (2010). No solo ambas son remakes de westerns clásicos, sino que ambas suponen una fresca actualización del género, e incluyen a actores de primera fila en su reparto. Además, ambas presentan notables dosis de realismo y un enfoque dramático calculado. Incluso ambas rompen con la imagen luminosa del western clásico y lo convierten en árido y frío (como ya hiciera el genial Clint Eastwood en «Sin Perdón«, toda una referencia estilística de lo que debe ser el «nuevo western» para los realizadores actuales).
Localizaciones de rodaje
En cuanto a las localizaciones de rodaje, como sucede casi siempre, la película no está filmada donde se supone que debe estarlo (Arizona), sino en Nuevo México, en el rancho Cerro Pelon, en Diablo Canyon (cerca de Santa Fe), en Ghost Ranch y en la propia Santa Fe.
«El Tren de las 3:10» revive el espíritu olvidado del western, y lo rescata con estilo y frescura, alejándolo del género que acabó decayendo en películas adocenadas, llenas de violencia gratuita, y carentes de sensibilidad.
